Almejas para fritos
Deben elegirse almejas grandes y ponerlas al fuego en una sartén limpia para que se abran, reservando el agua que suelten. Se abren y se les quita la carne que tienen, picándola; las cáscaras, se rascan bien con cuchillo para que queden limpias.
Se ponen en un cazo al fuego 40 ó 50 gramos de mantequilla (a falta de ella se pone manteca) o bien mitad mantequilla y mitad manteca. Cuando esté derretida, se añade una cucharada grande de harina por cada 6 almejas y se rehoga. Se tiene la leche muy caliente; se echa a la masa un cazo de leche y se bate con cuchara de palo hasta que se forme una bola; se retira del fuego y se trabaja igual. Luego, añadir más leche, sal y el picado de almejas junto con el agua que han soltado, previamente colado. Cocer muy bien de forma que resulte una pasta consistente.
Sacar a una fuente honda para que se enfríe.
Formar las croquetas pasando los pedazos de masa por harina, huevo y pan rallado y freír en abundante aceite caliente.
La pasta puede prepararse la víspera, pero las croquetas deben rebozarse lo más próximo posible al momento de freírlas.
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