La bicicleta y el ciclismo en Eibar
La fabricación de bicicletas
No se puede olvidar el hecho de que la gran mayoría de fabricantes armeros tuvieron la capacidad de reconvertir la maquinaria anterior para el nuevo producto a fabricar, pero al mismo tiempo, tampoco se puede dejar en el olvido la importancia de empresas como Orbea, GAC o BH en el desarrollo de la propia historia del ciclismo, historia que, en origen, viene motivada por la necesidad de vender bicicletas, de exportar y dar a conocer el producto: los ciclistas, los corredores no eran figuras conocidas como en la actualidad, era el velocípedo, la "máquina" la que primaba y se daba a conocer.
Las empresas más destacadas por su gran número de trabajadores, su implantación mundial y exportación fueron GAC, ORBEA y BH. "GAC" (Gárate, Anitua y Cía), registrada en el año 1892, fue creada por los herederos de Crispín Gárate y José Francisco Anitúa a los que después se unieron Nemesio Astaburuaga y Eulogio Anitua. GAC compró la patente de una bicicleta italiana y como era habitual en la época creó su propio equipo ciclista entre los que se encontraban José Elortza "Jose Eibar" y Mardaras. En el año 1951, GAC se dedicó a la fabricación de las primeras "Mobylettes", bajo licencia de la francesa "Motobecana". En el año 1974 se trasladó a Abadiño.
"Orbea Hermanos" se estableció hacia el año 1860, y sus fundadores fueron Juan Manuel, Mateo, Casimiro y Petra Orbea Murua. Fue una de las fábricas más renombradas de su época y la primera en instalar energía eléctrica en el año 1890. A raíz de la escisión familiar que se produjo en 1926, una parte de la familia conservó la firma "Orbea y Cía" para la producción de bicicletas y la otra -dedicada a la cartuchería- se instaló en Vitoria bajo la razón social "Hijos de Orbea S. en C". En los años 50, la fábrica eibarresa comenzó a fabricar la "Velosolex". El equipo ciclista "Orbea" tuvo entre sus corredores a Julián Berrendero y Luciano y Ricardo Montero Convertida actualmente en cooperativa, en el año 1975 se trasladó a Mallabia, actual sede de la legendaria fábrica.
"Beistegui Hermanos" arrancó a comienzos del s. XX. Domingo, Juan y Cosme Beistegui fueron sus fundadores y en sus inicios destacaron por la fabricación de pistolas tipo "Mauser" aunque desembocaron en la fabricación de bicicletas. Fue en el año 1929 cuando comenzaron en dicha actividad y, al igual que el resto de fabricantes, destacó en la esponsorización de grupos ciclistas con el objeto de abrir mercado y dar a conocer sus productos. En el año 1955, Beistegui empezó a fabricar motocicletas y en el año 1959 se trasladó a Vitoria. Actualmente bajo la denominación "Ciclo Europe" en la que están inmersas la BCH, Peugeot y Gitane.
Hay que destacar también fábricas como "Nicolas Arregui", "Zeus", "Echasa-Fenix", "Cil", Gamma o Abelux, de gran importancia en su día. "Zeus" fue el patrocinador de corredores como Julián Gorospe, Leanizbarrutia, Urien, Juan Tomás Martínez. Se cerró en los años 80, a raíz de la gran crisis. Tan importantes como los centros de producción principal eran los talleres dedicados a la fabricación de piezas auxiliares: "Triplex", "Iris", "Norma", Garechana, "Suar", "Hermógenes Larrañaga", "El Tigre", "Ges"... y las tiendas de venta y reparación como "Cancio Bilbatua", "Salaberria", "Askasibar" o "Juaristi".
Los inicios del ciclismo y la edad de oro:
el "Club Deportivo Eibar" y el "Club Ciclista Eibarrés"
El desarrollo cronológico de las pruebas ciclistas en Eibar se puede dividir en 5 períodos, períodos unidos a los avatares de la historia: la preguerra (1910-1936), la postguerra (1940-1951), la edad de oro del ciclismo eibarrés (1952-1974), la decadencia (1975-1979) y la revitalización actual con la introducción de nuevas tecnologías (1980-...).
En el ámbito deportivo -unido históricamente a la producción- Eibar comenzó su andadura como pueblo organizador de carreras ciclistas competitivas en el año 1910 con la Eibar-Elgoibar-Eibar. En el año 1913, el eibarrés Cándido Arrizabalaga "Apotxiano" fue el ganador de la Eibar-Zumarraga-Eibar por lo que podemos considerarlo el primer ciclista eibarrés de la historia en competición junto con José Mardaras Nazabal, Andrés Arriaga "Basarri" y Felix Gojenola en una época en la que el ciclismo aún no tenía, ni la repercusión, ni el interés que después ha despertado. Hecho más remarcable aún es la presencia en competición de una mujer eibarresa, María Magunacelaya ganadora de pruebas ciclistas de relieve en la época.
La Fundación del Club Deportivo en el año 1924 marcó un hito en el ámbito deportivo y ciclista. Suyas son las Subidas a Arrate (primera edición, 1941), las Fiestas del Pedal, y actualmente, la Escuela de Ciclismo y la Euskal Bizikleta (1991-....), ésta última junto al Club Ciclista Eibarrés y bajo el auspicio de EITB.
El Club Ciclista Eibarrés, fundado en el año 1927 -creado por Eulogio Garate, dueño de GAC con el convencimiento de que para la venta de las bicicletas era indispensable la organización de carreras-, club organizador de la famosa Bicicleta Eibarresa (primera época 1952-1973; la segunda, 1987-1990 a iniciativa del Club Deportivo en la que se juntó con la Subida a Arrate para hacer una carrera de más días); el Gran Premio de la República (1932-1936), así como de infinidad de carreras de relieve, fue fundamental en el desarrollo del ciclismo. Para hacernos una idea de Eibar como precursora en la organización de carreras hay que decir que la primera "Vuelta a España" se celebró en el año 1935 y que la etapa Bilbao-San Sebastián del 13 de mayo atravesó Eibar; etapa en la que -a modo de anécdota- el Club Deportivo se ocupó del aprovisionamiento. Gracias a los clubes citados, Eibar ha sido -y sigue siendo- el pueblo con más capacidad de organización con dos pruebas de carácter internacional en su haber en el momento actual: la Euskal Bizikleta para profesionales y el Memorial Valenciaga en la categoría de aficionados, carrera organizada en memoria de José Luis Valenciaga uno de los grandes impulsores del ciclismo; presidente de la Federación Guipuzcoana de Ciclismo. Ocupa un lugar destacado en la historia del ciclismo junto a Juan Gisasola "Juanito Txoko", el "padre" de la "Subida a Arrate".
Copa de Luciano Montero, ganador de la III Copa de la República, año 1934 / Cartel de la última edición del Gran Premio de la República, ganada por Julián Berrendero. 1936.
Pruebas que son de carácter internacional como la "Vuelta al País Vasco" tienen parte de su gran desarrollo en Eibar: en la última etapa de dicha prueba del año 1935 que terminó en Eibar, el ganador fue Gino Bartali, vencedor absoluto de la misma y uno de los hombres míticos del ciclismo mundial; la XVIII. Bicicleta Eibarresa y la IX.Vuelta al País Vasco se unificaron en el año 1969 hasta el año 1973. Rara era la edición de la "Vuelta a España" que no atravesaba Eibar: en el año 1959, se corrió la contra-reloj Eibar-Vitoria en la que participó el mito por excelencia del pelotón mundial: Fausto Coppi. Los eibarreses pudieron ver "in situ" al gran corredor transalpino, cuya figura aún perdura en la memoria de muchos. La etapa Bilbao-Eibar de la edición del 63 tuvo como vencedor a Jacques Anquetil. El velódromo portátil de Ipurua instalado para la Vuelta provocó el deseo -nunca cumplido- de construir un velódromo en Eibar.
El ciclo-cross -deporte que en la actualidad está en franca decadencia- tuvo gran repercusión en la villa con la organización de los Campeonatos de España en el año 1951 (Francisco Expósito), 1952 (Julián Aguirrezabal), 1953 (Cosme Barrutia), 1954 (Michelena) 1955 (Anton Barrutia) y 1956 (Michelena); la del 1957 fue para aficionados (Aguirreche).
La I. Subida a Arrate se celebró el día 20 de abril de 1941 con motivo del "Día del Finalista" organizada por el Club Deportivo. Pedro Zugasti fue el primer vencedor. Pero la importancia de la Subida se acrecentó con los años gracias a la labor de contratación de los mejores ciclistas por parte de Juan Gisasola "Txoko" y el grupo de organización del C.D.E. Las rampas de Arrate han conocido a los mejores ciclistas de la historia en sus diferentes épocas, desde Poulidor a Ventura Diaz, Indurain... En una época en la que los aficionados se dividían en "loroñistas" y "bahamontesistas" con sus respectivas "peñas" en Eibar y Bahamontes ganaba cinco veces la Subida, Loroño ganaba en el año 1949 y era el gran ídolo de los seguidores vascos y ganaba la "Bicicleta" del 56 y la del 58.
El año de la primera "Bicicleta Eibarresa" fue 1952, una carrera que se fraguó por la conmemoración del 25. aniversario del "Club Ciclista Eibarrés". Era la primera de carácter internacional por etapas que tenía su origen en Eibar gracias a grandes organizadores como los hermanos Sarasua, Valenciaga. El ganador de la primera edición fue Louis Caput. El prestigio de la prueba alcanzó fama mundial y en el año 1955 tenía 5 etapas. En la edición del año 61 contó con la presencia del tristemente desaparecido Tom Simpson, ganador de la 2ª etapa. La participación extranjera en la prueba era del máximo nivel pero no se puede obviar la presencia de corredores como Vélez, Txomin Perurena, Talamillo, Gabica, Errandonea, Tamames, y el ganador de la última edición del año 1973, Luis Ocaña. En el año 1974 se tomó la decisión de separar la "Vuelta al País Vasco" de la "Bicicleta Eibarresa" y la "Vuelta quedó en manos de "La Voz de España". No se pudo celebrar la "Bicicleta" por razones económicas.
La decadencia y el resurgimiento del ciclismo: de los 70 al nuevo milenio
Es la década de los 70 la de menor actividad organizativa: desde el año 1975 hasta el 1980 sólo se celebraron tres "subidas", la del 75, 77 y 78. La dimisión de Gisasola en el año 1975 -año en el que ganó Galdós- provocó una desaceleración de la prueba. Julián Gorospe fue el ganador en la categoría juvenil en el año 1978.
Miguel Indurain, ganador de la Euskal Bizikleta, ascendiendo el puerto de Arrate junto a Peter Luttenberger (Carrera) y Alex Zulle (Once) en la edición de 1996.
El año 81 es el de la reaparición de pruebas de carácter profesional, el de la unión de los dos Clubes, el Deportivo y el Ciclista, el de una nueva visión en lo que se refiere a la organización y la decisiva intervención de ETB en la prueba "Euskal Bizikleta", prueba que nace de la fusión de las dos históricas carreras eibarresas. En el 81 se organizó la XXXVIII Subida a Arrate, preludio de dos décadas -la del 80 y 90- en las que se produce una reactivación de gran efecto. Es la hora de organizadores como Julián Eraso, Riaño, Aranberri, Sarasua.... y la presencia de ciclistas como Lejarreta, Chioccioli, Bugno, Amstrong, Indurain, Zubeldia... Nuevas generaciones de ciclistas y responsables de organización con nuevas ideas como la de la creación del equipo de aficionados CDR en Eibar en el año 1995; equipo que nació al amparo del Club Deportivo de Eibar, actualmente bajo el auspicio y con el nombre de la mancomunidad de Ayuntamientos "Debabarrena" (Eibar, Ermua, Elgoibar, Soraluze, Mutriku, Mallabia y Mendaro).
Equipo ciclista Debabarrena.
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